21 diciembre 2005

En un vagón cualquiera...

“... Shimamura, presa del aburrimiento, se dedicaba a considerar distraídamente la palma de su mano izquierda, moviendo los dedos, y pensando al mismo tiempo que casi podía decirse que sólo aquella mano, la caricia de los dedos de aquella mano, había conservado un recuerdo sensible y vívido, un recuerdo cálido y carnal de la mujer con la que iba a reunirse. Porque la mujer en sí se desvanecía en su memoria a medida que él intentaba recordarla, sin dejar tras de sí nada a lo que aferrarse, nada que retener. En todo su ser, únicamente aquella mano izquierda, con el recuerdo límpido, casi actual, de su contacto, parecía permitir a Shimamura el retorno al pasado.”

Yasunari Kawabata. País de nieve.