07 octubre 2006

De otra manera

"Contaba cuatro años cuando su madre le leyó el cuento de Hansel y Gretel. Damjan se enamoró de Gretel en cuanto ella derramó sus primeras lágrimas ("Gretel derramaba lágrimas amargas y susurró a Hansel: “Se acabó, estamos perdidos"), mucho antes de que la madrastra los abandonara en el bosque ("La madrastra llevó a los niños a lo más profundo del bosque donde jamás habían estado") y mucho antes de que apareciera la bruja. Durante años Damjan se imaginaba que era Hansel, que dormía al lado de Gretel, y que esta lo quería tanto que por él empujaba a la malvada bruja al horno, lo liberaba de la jaula y con él, gordo a causa de tantos dulces, huía del bosque hacia una vida llena de alegrías. Gretel olía a chocolate."

Dragan Velikić, Plaza Dante